V TROFEO INVIERNO A DOS Y A TRES DEL REAL CLUB NÁUTICO DE GANDÍA
PUNTUABLE PARA EL CAMPEONATO DE ESPAÑA 2009 A DOS
14 Y 15 DE FEBRERO DE 2009
VIERNES, 13 DE FEBRERO
Estas últimas semanas, hemos estado en contacto con Nuria, del RCN Gandia, que nos ha ayudado de forma excepcional en la inscripción, transporte y gestiones varias (dónde está Gandia, cómo volver a Barcelona en tren,…). Sobra decir que todo era nuevo para nosotros y andábamos algo despistados.
Por fin llega el gran día, viernes. Nos están esperando para pasar las mediciones, controles de seguridad y precinto del motor.
No hemos podido salir de Barcelona hasta las 14:30 h así que, sin tiempo para hacer un descanso por el camino, vamos directos a Gandia, un trayecto en coche de 4 horas.
Nada más llegar nos presentamos, entregamos la documentación que faltaba (Certificado de Navegabilidad y Carnet de Patrón, que estaban en el barco) y repasamos todo el material para pasar la inspección. Balsa salvavidas, radiobaliza, VHF portátil, …que no nos falte nada! Nos informan que es necesario que llevemos dos anclas (sólo llevamos un ancla rígida y la de respeto tipo paracaídas que no sirve a nivel de seguridad). Nos echan un cable y entre Nuria y su equipo, nos consiguen una ancla de otro barco para que podamos competir. Una joya ya que un viernes por la tarde / noche, olvídate de encontrar una tienda abierta. Gracias! Pasamos los controles sin excepción y se precinta el motor.
En principio debemos mover el barco al pantalán exterior para agilizar el remolque al campo de regatas mañana pero, al enterarse Carlos, armador del Barbablue, vecino de amarre por casualidad, que íbamos a dormir en el barco, se ofrece intentar tramitar que podamos quedarnos dentro del recinto del puerto deportivo para dormir mejor. Luego nos confirman que se hace la excepción y nos quedamos en el amarre inicial. Sobra decir que Carlos sí que lleva su barco al pantalán exterior, junto con las demás embarcaciones, por lo que realmente estamos agradecidos por hacer una excepción con nosotros.
Ya con todo en orden para la regata de mañana, nos acercamos a un restaurante italiano y un buen plato de pasta y una cerveza y a dormir. De vuelta al amarre, nos fijamos que las embarcaciones del pantalán exterior realmente de mueven debido a la influencia de la cercanía de la bocana y de la corriente entrante. Miramos el Almaran y vemos que, rodeado de barcos de 50 y 60 pies, parece un pez pequeño, pero protegido y sin movimiento. Dormimos de un tirón.
SABADO, 14 DE FEBRERO
Nos despertamos a las 7:30 con luz que entra por las escotillas y empezamos a preparar toda la maniobra (cabos, poleas, …) y montamos la mayor. A las 8:45 vamos al desayuno y la reunión de armadores. Se respira un ambiente muy familiar y de camaradería. Nos espera una regata de 150 millas y es el momento de revisar instrucciones, recibir de XX los detalles más importantes (controles de paso, declaración de recorrido…) y la meteo. Carlos aprovecha para ejercer nuevamente que buen anfitrión y nos recuerda que no se nos ocurra chocar con una roca llamada “Bota” saliendo de Es Vedrà y que se encuentra rumbo directo a Gandia y nos insinúa ciertos roles a nivel local ya que “somos novatos” en la zona. Ni idea que existía dicha roca (que nos está señalizada con luces) y por supuesto saber de los vientos locales no tiene precio.
A las 10h nos remolcan hacia el exterior. El mar está como un plato y quedamos todos flotando como patos. Hacia las 12h empieza a entrar viento y sin más demora se da la salida. Aunque haya poco viento, se agradece que den la salida para “ir haciendo camino” ya que tenemos 150 millas por recorrer.
La salida es buena en un primer intento. Salimos bien, todos amurados a estribor, pero el Oceánico con buena velocidad y mejor ángulo, nos obliga a hacer un bordo ya que su mayor nos “envía” viento perjudicado. Lo mejor, la salida de Cafes Granell, Barbablue y New Sisters, que enseguida consiguen velocidad y se distancian por sotavento.
La flota se separa en dos grupos, los barcos a dos (excepto Brujo y Almaran) tomar el bordo a mar y los barcos a tres (excepto New Sisters) toman el bordo a tierra. Nosotros aguantamos el bordo a tierra amurados a babor durante 3-4 minutos y enseguida viramos yendo a buscar la flota de barcos a dos. No es que sepamos por dónde dará mejor pero decidimos ir en busca de nuestros competidores a dos, que además son los barcos con el conocimiento de los vientos locales (allá donde fueras haz lo que vieras).
comp.JPG)
La ceñida a estribor resulta acertada ya que durante las siguientes 8 horas progresivamente el viento va subiendo de intensidad y rolando a la derecha. Nos fijamos que a lo lejos el Cafes Granell vira y empieza a subir hacia Ibiza amurado a Babor. Todavía no le debe dar a rumbo directo pero decide hacer un acercamiento. Nosotros, el Un Moment y a lo lejos por la proa, el Barbablue, seguimos amurados a estribor. Luego, el Un Moment, al cruzar la popa del Cafes Granell decide virar y seguir su estela. Por nuestra parte aguantamos algo más pero, dado que el único barco comparable en velocidad (ambos de 33-34 pies) es el Un Moment, decidimos virar también y marcarle al través por barlovento a media milla. Cuando se haga de noche al menos podremos seguir las luces del Cafes Granell y Un Moment para saber cómo vamos. Barbablue se la juega y sigue amurado a estribor y se va a buscar la esquina. La noche va entrando y se va produciendo un progresivo role de izquierdas de unos 20 grados por lo que nos da bueno…suerte que no tomamos por tierra al principio!! Por sotavento seguimos las luces: blanca del Cafes Granell y roja del Un Moment. De los demás, ni rastro.
De repente oímos que el Un Moment se ha tenido que retirar y vemos su luz blanca, ha cambiado de rumbo y se aleja hacia la península. Lástima, perdemos un claro competidor de la regata y una referencia para la noche. Ya nos hemos emplazado en nuestro “duelo particular” para la próxima regata!!
Empieza a subir el viento. Son ya las 19h y calculamos que debemos volver a virar para poner rumbo a Ibiza, el viento se vuelve variable y las roladas con constantes. Por ello decidimos no irnos a una esquina e intentar movernos por el centro del campo de regatas.
Debido a un problema en el transporte a Gandia desde Barcelona, vamos sin electrónica de viento, no tenemos TWS ni TWA. Se hace difícil por no decir imposible ver las lanas del Génova sin iluminarlas y, sin electrónica, llevamos el barco “a tacto” intentando no aproarlo pero tampoco perder ángulo.
Ya amurados a estribor sigue subiendo el viento. Hemos aguantado el ligero pensando que quizás por la noche podría amainar algo, pero todo lo contrario. Lo hablamos, sin duda ya es de Génova pesado pero vemos que en la proa la noche está más negra, si cabe. Sin duda viene un frente con viento por lo que decidimos pasar de Génova Ligero a Génova 3 directamente. Además vemos que las demás luces avanzan más que nosotros. Si los demás andan y nosotros no, está claro que algo va mal!!
Vamos ciñendo a 5 nudos pero muy escorados por lo que sin duda, derivamos. Vemos que la luz blanca de Cafes Granell se nos está alejando. Sigue subiendo el viento, no hay más tiempo para dilaciones. Vamos a dos, nos miramos, un peeling puede ser llevarnos bastante tiempo. Decidimos arriar el Génova ligero (el barco se pone a 3 nudos) e izar el Génova 3 (no tardamos más de 4 minutos). La maniobra ha ido bien. El barco se pone a 6 nudos…..a ver si la próxima vez hacemos el peeling antes!! Ya sabemos que sin tripulación que “haga banda”, con 16 nudos ya nos entra el Génova 3 y parece que no lo aprendamos!!! No quiero calcular lo que hemos regalado, pudiendo haber hecho el peeling al menos media hora antes. Más vale no pensarlo, queda mucha regata…
DOMINGO, 15 DE FEBRERO
Sigue subiendo el viento, sin duda estamos al menos en 20 nudos sostenidos con puntas de 25 nudos. A menudo la mayor queda flameando y la velocidad nos la da el Génova pero cada vez hay más oleaje y nos cuesta pasar la ola. Los rociones sobre cubierta son constantes y nos cuesta mantener el rumbo.
Empieza el festival….faltan dos millas para Es Vedrà y el viento no nos permite cazar la mayor, está flameando constantemente. Sorprende lo que llegan a aguantar, de todas formas así no podemos seguir….Empezamos a pensar a hacer un rizo…valoramos el tiempo que nos hará perder, la pérdida de velocidad, …y que sin duda al resguardo de Ibiza y para pasar Es Vedrà nos hará falta toda la mayor por el desvente de la roca….no tenemos claro. ¿Cuál es la mejor decisión? Mientras tanto el carro de la mayor a sotavento, la mayor cazada y ….cuando entra la racha nos vamos de orzada…así no vamos bien!! Optamos por soltar más escota (la mayor vuelve a flamear sin parar) pero al menos mantenemos rumbo y velocidad. Ahí va el invento: cogemos parte de la escota de mayor que no trabaja y que está en cubierta y montamos una especie de barber (sobre la escota de mayor que trabaja) hacia la mitad de la distancia entre la botavara y la polea sobre cubierta. Cuando entra la racha soltamos esta “escota de respecto” para vaciar la presión de la vela y evitar que el barco se vaya de orzada (aunque la vela flamee momentáneamente), y cuando la racha cede, cazamos la “escota de respeto” para evitar que la mayor flamee….el invento funciona. Conseguimos estabilizar el barco, evitando irnos de orzada y que la mayor se nos rompa por el flameo. Nos da la sensación que llevamos el 34 pies como si fuese un vela ligera, escota en mano y a anticiparse cuando empieza a cargar la racha…
Nos empiezan a cruzar los 40 y 45 pies que ya han montado Es Vedrà y vuelven hacia Gandia. Pasan dos barcos, ambos sin espi, se les ve muy rápidos, con una enorme estela blanca por la popa, menudas planeadas…y pensar que a nosotros nos queda un buen rato de ceñida incómoda y nos siguen barriendo las olas.....
Avisamos al comité, faltan 2 millas….pero nos da la impresión que no estamos remontando. Pasan los minutos y la distancia parece la misma.
Nos acercamos a Ibiza por sotavento ya que, en el rumbo hacia tierra, el oleaje se reduce y la intensidad de viento disminuye…con lo que tenemos más velocidad y no debe haber más de 20 nudos. No obstante, el quedarnos en el desvente de la isla, vemos que sólo avanzamos a 5 nudos de velocidad,….decidimos volver a virar hacia fuera, …pasan un par de minutos, la intensidad de viento vuelve a ser muy alta (calculamos 25 – 30 nudos), pero volvemos a una velocidad sostenida de 6 nudos, con la mayor en la mano. El oleaje barre la cubierta de forma constante, nos vamos de orzada… decidimos volver a virar hacia tierra….y la situación se repite al menos con 10 viradas en menos de media milla. Estamos exhaustos.
Conseguimos acercarnos a Es Vedrà, mirando de reojo el ordenador para ver la posición exacta del barco sobre las cartas náuticas y de frente la mole negra que es Es Vedrà. De noche las distancias son difíciles de calcular y parece que vamos a chocar en cualquier momento…pero el GPS todavía marca un cuarto de milla!!
Llevamos 12 horas de regata y a menos de media milla de Es Vedrà nos cruzamos sin preferencia con Oceánico (35 pies) que compite a tres. Nos cuesta distinguir las luces verde y roja. No queremos riesgos. Le pasamos por la popa. Al menos nos volvemos a cruzar con él 3 veces antes de Es Vedrà. No estamos nada tranquilos, con noche oscura y viento fuerte, intentando acercarnos por primera vez a esta “roca negra” lo último en lo que piensas es que tengas que ir haciendo bordos con otro barco (él debe pensar lo mismo).
Faltan 100 metros, empieza el baile de dirección de viento, tenemos delante el Oceánico y vemos que se queda encalmado cerca de tierra, viramos y nos separamos. Entre virada y virada conseguimos no quedarnos encalmados. Pasamos el punto de control detrás de Es Vedrà con menos de 5 nudos de intensidad de viento….parece increíble que con el “temporal” que hay fuera, nos encontremos “flotando” a tres nudos de velocidad y ambos “haciendo banda por sotavento”.
Salimos de la isla amurados a estribor, pero con rumbo directo a la roca “Bota”, recuerdo el comentario del armador del Barbablue, Carlos, que nos avisó que no hay más de dos palmos de agua en ese punto… y además no sabemos qué dirección de viento vamos a encontrar…hablamos…. ¿porqué no trasluchamos hacia fuera? Lo que es seguro es que el viento será estable, el problema es la intensidad…..faltan 62 millas a Gandia….decidimos ir a por el viento!!
Siguiente problema….cuando entre el viento al salir del desvente de Es Vedrà, lo vamos a pasar mal y no tendremos mucha capacidad de maniobra….nos quedan un par de minutos antes que empiece el festival. Lo hablamos, lo volvemos a hablar…o izamos espi ahora y lo amarramos “a rabiar” o seguimos con Génova…hablamos del rumbo, es una popa, popa redonda hacia Gandia…..eso nos hace decidir. Si el ángulo aparente fuese un 120 o incluso un 140, ni hablar de spi con 30 nudos…pero con 160-180 perdemos mucho ángulo con Génova…a por todas, espi arriba!!! Izamos el 0,6 (por no tener un 0,7), barbers cazados, tangón abierto pero rígido con la contra a tope, escota de espi corta, mayor abierta, contra de mayor suelta, …entra de nuevo la racha y el oleaje,…..nos plantamos en 11 nudos de velocidad sostenidos.
El oleaje no parece del mediterráneo, olas altas y largas, barridas por la parte superior, en algunos puntos rompen a sotavento….empiezo a pensar que nuestro barco es una cafetera,….más que la velocidad o el ángulo, buscamos esquivar el rompiente en la parte superior de las olas y tampoco clavar la proa en el seno de la ola.
Vamos pasados de trapo, el barco se sube a las olas como si fuera un vela ligera y luego baja planeando pero no recto sino incluso con un efecto lateral. Me recuerda cuando planeábamos con los 420 que el barco “se atravesaba” a la ola…soltamos espi para no irnos de orzada.
Lo más complicado es que no tenemos TWA, sólo nos podemos guiar por el windex. Que no fallen la luces de tope de palo o estamos perdidos!! En algunos momentos vamos trasluchados, hay que corregir de inmediato.
En una de estas que carga la racha y se intuye que nos vamos de orzada, giro la rueda a estribor y compenso cayendo a sotavento, estoy en el seno de una ola, ha caído demasiado rápido, me encuentro trasluchado giro la rueda a babor para intentar volver la mayor a su sitio, nos pasa una ola por debajo y nos levanta a la parte más alta de la ola, entra la racha, la mayor traslucha a estribor con fuerza, el barco arranca hacia babor, no lo puedo compensar con el timón, se me va, se me va,….. me he ido de orzada… el barco se pone casi horizontal, me cojo a la rueda y a un candelero intentando quedar a lado de barlovento del barco, pierdo el equilibrio en un pie, noto que el otro pie se apoya en los mandos del motor que están a estribor…..David, cerca del piano, se agarra como puede al winche, busca la escota del espi para dejarla en banda…el ruido es ensordecedor….parece que las velas hayan explotado, el barco tiembla debido a que las velas flamean con furia,….estamos sin gobierno.
Pongo la rueda a la vía, la mayor en banda y el espi está lejos, como una bandera al viento por la proa,…..cazamos nuevamente la escota de espi pero sólo un poco, que no queremos irnos de orzada de nuevo, la cazamos lo suficiente para que el barco consiga aun mínimo de velocidad y que no estemos a merced del viento y de la olas. Parece que el barco vuelve a arrancar, no muevo la rueda, me interesa la velocidad o perderemos nuevamente el gobierno,….4 nudos…caigo poco a poco, empiezo a gobernar con algo de espi y la mayor en banda pero que ya noto cómo tira. Ya estamos sobre una ola, seguimos cazando espi para volver a amarrarlo cerca del barco,…..nos vamos tranquilizando a medida que volvemos a controlar la situación. Por suerte el espi no se ha liado con el tuff luff, de lo contrario, ya podríamos irnos para casa!!
Sólo nos fuimos de orzada una sola vez durante nuestra bajada de Ibiza a la península,….pero fue suficiente. Navegando en rumbo largo o popa, por mucho viento que te pueda parecer que hace, sin electrónica, realmente “sabes” el viento que hace cuando el barco se te queda aproado y sin gobierno….si nos pasa una segunda vez, hubiéramos arriado espi.
Ya empieza a amanecer, nos escuecen los ojos de la sal, estamos cansados de la tensión y las piernas sobrecargadas de estar a la rueda, no hemos tenido tiempo de tener frío ya que no nos hemos quedado parados en ningún momento.
Empezamos a ver algún barco al través por ambos lados, no sabemos distinguir quiénes con, no se parecen a los barcos que teníamos cerca en Es Vedrà. Uno de ellos parece que tiene el casco pintado, con velas de kevlar con publicidad, sacamos los binoculares…es el Beneteau 40.7 Cafes Granell, menuda sorpresa. Nos hemos colado con los 40 pies, que bajan sin espi.
Luego en tierra supimos que el Brujo (Beneteau 47.7) y el Almaran, habían sido los únicos que arriesgaron izando espi por la noche. El Brujo tuvo problemas con el espi con una maniobra y se tuvo que retirar.
Quedan 14 millas y vamos a 8 nudos con un viento de unos 15 nudos de intensidad, calculamos que en un par de horas llegamos….como siempre, demasiado optimistas. El viento rola de derechas y empieza a caer el viento hasta quedarnos prácticamente a cero. Hacemos un peeling de spi sirve de algo, pero poco. Eso sí, el oleaje se mantiene y nos vapulea sin piedad.
Avanzamos a 2 nudos, sin viento, sin duda la corriente nos arrastra….es desesperante. Sólo de pensar la noche que hemos pasado, para acabar flotando a merced de las olas…. Nos vamos cruzando con Cafes Granell dependiendo de quién coge la ligera brisa, pasa delante, son millas y millas de irse controlando intentando ver por dónde puede entrar el viento. Aunque pongamos nuestro peso a sotavento, sirve de bien poco ya que las olas hacen que la mayor vaya de lado a lado. Es una popa redonda. Hacemos un sinfín de pruebas de rumbos y ángulos, sin resultado. Optamos buscar un través cerrado pero nos aleja mucho y conseguimos poca velocidad. Llegamos a la conclusión que quien manda es la corriente a favor. Por ello cazamos la mayor al centro, e intentamos hacer que el espi se infle.
Llevamos 3 horas de encalmada,….la corriente nos lleva paralelos a la costa desde Cabo Nao hacia Gandia.
Todavía nos quedaba aventura, el Cafes Granell parece que ha encontrado la brisa buena más cerca de la costa (200 metros de la arena) pero se para y queda a merced de nuevo de las olas. El oleaje le empuja hacia la playa…..la situación no está nada clara. Estamos a no más de media milla de la llegada. Por fin les llega de nuevo una muy ligera brisa y vuelven a poder gobernar,…luego nos explicaron que estuvieron a punto de poner motor para no embarrancar.
Entran 3 – 4 nudos de viento, que nos permiten acercarnos al espigón,…y por fin entramos!!! Se acabó.
El jurado se acerca para desprecintar el motor y ponemos rumbo al amarre.
Amarramos cerca del Scampi 45 que nos felicita por haber ganado y nos invita a un buen vino. Hay que recoger la maniobra y las velas lo antes posible. Tenemos que poner rumbo a Altea (40 millas) lo antes posible. A medio recoger, llega el medidor y repasamos las medidas de mayor, génovas, espis,…todo OK.
Cargamos el barco con lo que teníamos en el coche (agua, velas de transporte,..), devolvemos el ancla y pongo rumbo a Altea a las 14:30.
En el trayecto, hago balance y pienso en la enorme hospitalidad del RCN Gandia (con Nuria y si equipo), de nuestro “padre adoptivo” Carlos (del Barbablue), de la ceñida sin descanso con el Un Moment el sábado, de lo mal que lo pasamos en la ceñida para montar es Vedrà, de las planeadas imposibles en la popa de noche hacia la península, de la “maldita” encalmada al final…. Ah, y del bocadillo de calamares que nos tomamos tras la regata, para no perder la tradición!!
Son las 23h, Altea ya nos tenían amarre preparado, cogemos el coche, nos quedan 4 horas y media hasta Barcelona. La próxima regata es el 6-7 de Marzo, 200 Millas a Dos del CNAltea. Lo hemos dejado todo preparado. A ver qué nos depara la meteo en la próxima regata!
PUNTUABLE PARA EL CAMPEONATO DE ESPAÑA 2009 A DOS
14 Y 15 DE FEBRERO DE 2009
VIERNES, 13 DE FEBRERO
Estas últimas semanas, hemos estado en contacto con Nuria, del RCN Gandia, que nos ha ayudado de forma excepcional en la inscripción, transporte y gestiones varias (dónde está Gandia, cómo volver a Barcelona en tren,…). Sobra decir que todo era nuevo para nosotros y andábamos algo despistados.
Por fin llega el gran día, viernes. Nos están esperando para pasar las mediciones, controles de seguridad y precinto del motor.
No hemos podido salir de Barcelona hasta las 14:30 h así que, sin tiempo para hacer un descanso por el camino, vamos directos a Gandia, un trayecto en coche de 4 horas.
Nada más llegar nos presentamos, entregamos la documentación que faltaba (Certificado de Navegabilidad y Carnet de Patrón, que estaban en el barco) y repasamos todo el material para pasar la inspección. Balsa salvavidas, radiobaliza, VHF portátil, …que no nos falte nada! Nos informan que es necesario que llevemos dos anclas (sólo llevamos un ancla rígida y la de respeto tipo paracaídas que no sirve a nivel de seguridad). Nos echan un cable y entre Nuria y su equipo, nos consiguen una ancla de otro barco para que podamos competir. Una joya ya que un viernes por la tarde / noche, olvídate de encontrar una tienda abierta. Gracias! Pasamos los controles sin excepción y se precinta el motor.
En principio debemos mover el barco al pantalán exterior para agilizar el remolque al campo de regatas mañana pero, al enterarse Carlos, armador del Barbablue, vecino de amarre por casualidad, que íbamos a dormir en el barco, se ofrece intentar tramitar que podamos quedarnos dentro del recinto del puerto deportivo para dormir mejor. Luego nos confirman que se hace la excepción y nos quedamos en el amarre inicial. Sobra decir que Carlos sí que lleva su barco al pantalán exterior, junto con las demás embarcaciones, por lo que realmente estamos agradecidos por hacer una excepción con nosotros.
Ya con todo en orden para la regata de mañana, nos acercamos a un restaurante italiano y un buen plato de pasta y una cerveza y a dormir. De vuelta al amarre, nos fijamos que las embarcaciones del pantalán exterior realmente de mueven debido a la influencia de la cercanía de la bocana y de la corriente entrante. Miramos el Almaran y vemos que, rodeado de barcos de 50 y 60 pies, parece un pez pequeño, pero protegido y sin movimiento. Dormimos de un tirón.
SABADO, 14 DE FEBRERO
Nos despertamos a las 7:30 con luz que entra por las escotillas y empezamos a preparar toda la maniobra (cabos, poleas, …) y montamos la mayor. A las 8:45 vamos al desayuno y la reunión de armadores. Se respira un ambiente muy familiar y de camaradería. Nos espera una regata de 150 millas y es el momento de revisar instrucciones, recibir de XX los detalles más importantes (controles de paso, declaración de recorrido…) y la meteo. Carlos aprovecha para ejercer nuevamente que buen anfitrión y nos recuerda que no se nos ocurra chocar con una roca llamada “Bota” saliendo de Es Vedrà y que se encuentra rumbo directo a Gandia y nos insinúa ciertos roles a nivel local ya que “somos novatos” en la zona. Ni idea que existía dicha roca (que nos está señalizada con luces) y por supuesto saber de los vientos locales no tiene precio.
A las 10h nos remolcan hacia el exterior. El mar está como un plato y quedamos todos flotando como patos. Hacia las 12h empieza a entrar viento y sin más demora se da la salida. Aunque haya poco viento, se agradece que den la salida para “ir haciendo camino” ya que tenemos 150 millas por recorrer.
La salida es buena en un primer intento. Salimos bien, todos amurados a estribor, pero el Oceánico con buena velocidad y mejor ángulo, nos obliga a hacer un bordo ya que su mayor nos “envía” viento perjudicado. Lo mejor, la salida de Cafes Granell, Barbablue y New Sisters, que enseguida consiguen velocidad y se distancian por sotavento.
La flota se separa en dos grupos, los barcos a dos (excepto Brujo y Almaran) tomar el bordo a mar y los barcos a tres (excepto New Sisters) toman el bordo a tierra. Nosotros aguantamos el bordo a tierra amurados a babor durante 3-4 minutos y enseguida viramos yendo a buscar la flota de barcos a dos. No es que sepamos por dónde dará mejor pero decidimos ir en busca de nuestros competidores a dos, que además son los barcos con el conocimiento de los vientos locales (allá donde fueras haz lo que vieras).
comp.JPG)
La ceñida a estribor resulta acertada ya que durante las siguientes 8 horas progresivamente el viento va subiendo de intensidad y rolando a la derecha. Nos fijamos que a lo lejos el Cafes Granell vira y empieza a subir hacia Ibiza amurado a Babor. Todavía no le debe dar a rumbo directo pero decide hacer un acercamiento. Nosotros, el Un Moment y a lo lejos por la proa, el Barbablue, seguimos amurados a estribor. Luego, el Un Moment, al cruzar la popa del Cafes Granell decide virar y seguir su estela. Por nuestra parte aguantamos algo más pero, dado que el único barco comparable en velocidad (ambos de 33-34 pies) es el Un Moment, decidimos virar también y marcarle al través por barlovento a media milla. Cuando se haga de noche al menos podremos seguir las luces del Cafes Granell y Un Moment para saber cómo vamos. Barbablue se la juega y sigue amurado a estribor y se va a buscar la esquina. La noche va entrando y se va produciendo un progresivo role de izquierdas de unos 20 grados por lo que nos da bueno…suerte que no tomamos por tierra al principio!! Por sotavento seguimos las luces: blanca del Cafes Granell y roja del Un Moment. De los demás, ni rastro.
De repente oímos que el Un Moment se ha tenido que retirar y vemos su luz blanca, ha cambiado de rumbo y se aleja hacia la península. Lástima, perdemos un claro competidor de la regata y una referencia para la noche. Ya nos hemos emplazado en nuestro “duelo particular” para la próxima regata!!
Empieza a subir el viento. Son ya las 19h y calculamos que debemos volver a virar para poner rumbo a Ibiza, el viento se vuelve variable y las roladas con constantes. Por ello decidimos no irnos a una esquina e intentar movernos por el centro del campo de regatas.
Debido a un problema en el transporte a Gandia desde Barcelona, vamos sin electrónica de viento, no tenemos TWS ni TWA. Se hace difícil por no decir imposible ver las lanas del Génova sin iluminarlas y, sin electrónica, llevamos el barco “a tacto” intentando no aproarlo pero tampoco perder ángulo.
Ya amurados a estribor sigue subiendo el viento. Hemos aguantado el ligero pensando que quizás por la noche podría amainar algo, pero todo lo contrario. Lo hablamos, sin duda ya es de Génova pesado pero vemos que en la proa la noche está más negra, si cabe. Sin duda viene un frente con viento por lo que decidimos pasar de Génova Ligero a Génova 3 directamente. Además vemos que las demás luces avanzan más que nosotros. Si los demás andan y nosotros no, está claro que algo va mal!!
Vamos ciñendo a 5 nudos pero muy escorados por lo que sin duda, derivamos. Vemos que la luz blanca de Cafes Granell se nos está alejando. Sigue subiendo el viento, no hay más tiempo para dilaciones. Vamos a dos, nos miramos, un peeling puede ser llevarnos bastante tiempo. Decidimos arriar el Génova ligero (el barco se pone a 3 nudos) e izar el Génova 3 (no tardamos más de 4 minutos). La maniobra ha ido bien. El barco se pone a 6 nudos…..a ver si la próxima vez hacemos el peeling antes!! Ya sabemos que sin tripulación que “haga banda”, con 16 nudos ya nos entra el Génova 3 y parece que no lo aprendamos!!! No quiero calcular lo que hemos regalado, pudiendo haber hecho el peeling al menos media hora antes. Más vale no pensarlo, queda mucha regata…
DOMINGO, 15 DE FEBRERO
Sigue subiendo el viento, sin duda estamos al menos en 20 nudos sostenidos con puntas de 25 nudos. A menudo la mayor queda flameando y la velocidad nos la da el Génova pero cada vez hay más oleaje y nos cuesta pasar la ola. Los rociones sobre cubierta son constantes y nos cuesta mantener el rumbo.
Empieza el festival….faltan dos millas para Es Vedrà y el viento no nos permite cazar la mayor, está flameando constantemente. Sorprende lo que llegan a aguantar, de todas formas así no podemos seguir….Empezamos a pensar a hacer un rizo…valoramos el tiempo que nos hará perder, la pérdida de velocidad, …y que sin duda al resguardo de Ibiza y para pasar Es Vedrà nos hará falta toda la mayor por el desvente de la roca….no tenemos claro. ¿Cuál es la mejor decisión? Mientras tanto el carro de la mayor a sotavento, la mayor cazada y ….cuando entra la racha nos vamos de orzada…así no vamos bien!! Optamos por soltar más escota (la mayor vuelve a flamear sin parar) pero al menos mantenemos rumbo y velocidad. Ahí va el invento: cogemos parte de la escota de mayor que no trabaja y que está en cubierta y montamos una especie de barber (sobre la escota de mayor que trabaja) hacia la mitad de la distancia entre la botavara y la polea sobre cubierta. Cuando entra la racha soltamos esta “escota de respecto” para vaciar la presión de la vela y evitar que el barco se vaya de orzada (aunque la vela flamee momentáneamente), y cuando la racha cede, cazamos la “escota de respeto” para evitar que la mayor flamee….el invento funciona. Conseguimos estabilizar el barco, evitando irnos de orzada y que la mayor se nos rompa por el flameo. Nos da la sensación que llevamos el 34 pies como si fuese un vela ligera, escota en mano y a anticiparse cuando empieza a cargar la racha…
Nos empiezan a cruzar los 40 y 45 pies que ya han montado Es Vedrà y vuelven hacia Gandia. Pasan dos barcos, ambos sin espi, se les ve muy rápidos, con una enorme estela blanca por la popa, menudas planeadas…y pensar que a nosotros nos queda un buen rato de ceñida incómoda y nos siguen barriendo las olas.....
Avisamos al comité, faltan 2 millas….pero nos da la impresión que no estamos remontando. Pasan los minutos y la distancia parece la misma.
Nos acercamos a Ibiza por sotavento ya que, en el rumbo hacia tierra, el oleaje se reduce y la intensidad de viento disminuye…con lo que tenemos más velocidad y no debe haber más de 20 nudos. No obstante, el quedarnos en el desvente de la isla, vemos que sólo avanzamos a 5 nudos de velocidad,….decidimos volver a virar hacia fuera, …pasan un par de minutos, la intensidad de viento vuelve a ser muy alta (calculamos 25 – 30 nudos), pero volvemos a una velocidad sostenida de 6 nudos, con la mayor en la mano. El oleaje barre la cubierta de forma constante, nos vamos de orzada… decidimos volver a virar hacia tierra….y la situación se repite al menos con 10 viradas en menos de media milla. Estamos exhaustos.
Conseguimos acercarnos a Es Vedrà, mirando de reojo el ordenador para ver la posición exacta del barco sobre las cartas náuticas y de frente la mole negra que es Es Vedrà. De noche las distancias son difíciles de calcular y parece que vamos a chocar en cualquier momento…pero el GPS todavía marca un cuarto de milla!!
Llevamos 12 horas de regata y a menos de media milla de Es Vedrà nos cruzamos sin preferencia con Oceánico (35 pies) que compite a tres. Nos cuesta distinguir las luces verde y roja. No queremos riesgos. Le pasamos por la popa. Al menos nos volvemos a cruzar con él 3 veces antes de Es Vedrà. No estamos nada tranquilos, con noche oscura y viento fuerte, intentando acercarnos por primera vez a esta “roca negra” lo último en lo que piensas es que tengas que ir haciendo bordos con otro barco (él debe pensar lo mismo).
Faltan 100 metros, empieza el baile de dirección de viento, tenemos delante el Oceánico y vemos que se queda encalmado cerca de tierra, viramos y nos separamos. Entre virada y virada conseguimos no quedarnos encalmados. Pasamos el punto de control detrás de Es Vedrà con menos de 5 nudos de intensidad de viento….parece increíble que con el “temporal” que hay fuera, nos encontremos “flotando” a tres nudos de velocidad y ambos “haciendo banda por sotavento”.
Salimos de la isla amurados a estribor, pero con rumbo directo a la roca “Bota”, recuerdo el comentario del armador del Barbablue, Carlos, que nos avisó que no hay más de dos palmos de agua en ese punto… y además no sabemos qué dirección de viento vamos a encontrar…hablamos…. ¿porqué no trasluchamos hacia fuera? Lo que es seguro es que el viento será estable, el problema es la intensidad…..faltan 62 millas a Gandia….decidimos ir a por el viento!!
Siguiente problema….cuando entre el viento al salir del desvente de Es Vedrà, lo vamos a pasar mal y no tendremos mucha capacidad de maniobra….nos quedan un par de minutos antes que empiece el festival. Lo hablamos, lo volvemos a hablar…o izamos espi ahora y lo amarramos “a rabiar” o seguimos con Génova…hablamos del rumbo, es una popa, popa redonda hacia Gandia…..eso nos hace decidir. Si el ángulo aparente fuese un 120 o incluso un 140, ni hablar de spi con 30 nudos…pero con 160-180 perdemos mucho ángulo con Génova…a por todas, espi arriba!!! Izamos el 0,6 (por no tener un 0,7), barbers cazados, tangón abierto pero rígido con la contra a tope, escota de espi corta, mayor abierta, contra de mayor suelta, …entra de nuevo la racha y el oleaje,…..nos plantamos en 11 nudos de velocidad sostenidos.
El oleaje no parece del mediterráneo, olas altas y largas, barridas por la parte superior, en algunos puntos rompen a sotavento….empiezo a pensar que nuestro barco es una cafetera,….más que la velocidad o el ángulo, buscamos esquivar el rompiente en la parte superior de las olas y tampoco clavar la proa en el seno de la ola.
Vamos pasados de trapo, el barco se sube a las olas como si fuera un vela ligera y luego baja planeando pero no recto sino incluso con un efecto lateral. Me recuerda cuando planeábamos con los 420 que el barco “se atravesaba” a la ola…soltamos espi para no irnos de orzada.
Lo más complicado es que no tenemos TWA, sólo nos podemos guiar por el windex. Que no fallen la luces de tope de palo o estamos perdidos!! En algunos momentos vamos trasluchados, hay que corregir de inmediato.
En una de estas que carga la racha y se intuye que nos vamos de orzada, giro la rueda a estribor y compenso cayendo a sotavento, estoy en el seno de una ola, ha caído demasiado rápido, me encuentro trasluchado giro la rueda a babor para intentar volver la mayor a su sitio, nos pasa una ola por debajo y nos levanta a la parte más alta de la ola, entra la racha, la mayor traslucha a estribor con fuerza, el barco arranca hacia babor, no lo puedo compensar con el timón, se me va, se me va,….. me he ido de orzada… el barco se pone casi horizontal, me cojo a la rueda y a un candelero intentando quedar a lado de barlovento del barco, pierdo el equilibrio en un pie, noto que el otro pie se apoya en los mandos del motor que están a estribor…..David, cerca del piano, se agarra como puede al winche, busca la escota del espi para dejarla en banda…el ruido es ensordecedor….parece que las velas hayan explotado, el barco tiembla debido a que las velas flamean con furia,….estamos sin gobierno.
Pongo la rueda a la vía, la mayor en banda y el espi está lejos, como una bandera al viento por la proa,…..cazamos nuevamente la escota de espi pero sólo un poco, que no queremos irnos de orzada de nuevo, la cazamos lo suficiente para que el barco consiga aun mínimo de velocidad y que no estemos a merced del viento y de la olas. Parece que el barco vuelve a arrancar, no muevo la rueda, me interesa la velocidad o perderemos nuevamente el gobierno,….4 nudos…caigo poco a poco, empiezo a gobernar con algo de espi y la mayor en banda pero que ya noto cómo tira. Ya estamos sobre una ola, seguimos cazando espi para volver a amarrarlo cerca del barco,…..nos vamos tranquilizando a medida que volvemos a controlar la situación. Por suerte el espi no se ha liado con el tuff luff, de lo contrario, ya podríamos irnos para casa!!
Sólo nos fuimos de orzada una sola vez durante nuestra bajada de Ibiza a la península,….pero fue suficiente. Navegando en rumbo largo o popa, por mucho viento que te pueda parecer que hace, sin electrónica, realmente “sabes” el viento que hace cuando el barco se te queda aproado y sin gobierno….si nos pasa una segunda vez, hubiéramos arriado espi.
Ya empieza a amanecer, nos escuecen los ojos de la sal, estamos cansados de la tensión y las piernas sobrecargadas de estar a la rueda, no hemos tenido tiempo de tener frío ya que no nos hemos quedado parados en ningún momento.
Empezamos a ver algún barco al través por ambos lados, no sabemos distinguir quiénes con, no se parecen a los barcos que teníamos cerca en Es Vedrà. Uno de ellos parece que tiene el casco pintado, con velas de kevlar con publicidad, sacamos los binoculares…es el Beneteau 40.7 Cafes Granell, menuda sorpresa. Nos hemos colado con los 40 pies, que bajan sin espi.
Luego en tierra supimos que el Brujo (Beneteau 47.7) y el Almaran, habían sido los únicos que arriesgaron izando espi por la noche. El Brujo tuvo problemas con el espi con una maniobra y se tuvo que retirar.
Quedan 14 millas y vamos a 8 nudos con un viento de unos 15 nudos de intensidad, calculamos que en un par de horas llegamos….como siempre, demasiado optimistas. El viento rola de derechas y empieza a caer el viento hasta quedarnos prácticamente a cero. Hacemos un peeling de spi sirve de algo, pero poco. Eso sí, el oleaje se mantiene y nos vapulea sin piedad.
Avanzamos a 2 nudos, sin viento, sin duda la corriente nos arrastra….es desesperante. Sólo de pensar la noche que hemos pasado, para acabar flotando a merced de las olas…. Nos vamos cruzando con Cafes Granell dependiendo de quién coge la ligera brisa, pasa delante, son millas y millas de irse controlando intentando ver por dónde puede entrar el viento. Aunque pongamos nuestro peso a sotavento, sirve de bien poco ya que las olas hacen que la mayor vaya de lado a lado. Es una popa redonda. Hacemos un sinfín de pruebas de rumbos y ángulos, sin resultado. Optamos buscar un través cerrado pero nos aleja mucho y conseguimos poca velocidad. Llegamos a la conclusión que quien manda es la corriente a favor. Por ello cazamos la mayor al centro, e intentamos hacer que el espi se infle.
Llevamos 3 horas de encalmada,….la corriente nos lleva paralelos a la costa desde Cabo Nao hacia Gandia.
Todavía nos quedaba aventura, el Cafes Granell parece que ha encontrado la brisa buena más cerca de la costa (200 metros de la arena) pero se para y queda a merced de nuevo de las olas. El oleaje le empuja hacia la playa…..la situación no está nada clara. Estamos a no más de media milla de la llegada. Por fin les llega de nuevo una muy ligera brisa y vuelven a poder gobernar,…luego nos explicaron que estuvieron a punto de poner motor para no embarrancar.
Entran 3 – 4 nudos de viento, que nos permiten acercarnos al espigón,…y por fin entramos!!! Se acabó.
El jurado se acerca para desprecintar el motor y ponemos rumbo al amarre.
Amarramos cerca del Scampi 45 que nos felicita por haber ganado y nos invita a un buen vino. Hay que recoger la maniobra y las velas lo antes posible. Tenemos que poner rumbo a Altea (40 millas) lo antes posible. A medio recoger, llega el medidor y repasamos las medidas de mayor, génovas, espis,…todo OK.
Cargamos el barco con lo que teníamos en el coche (agua, velas de transporte,..), devolvemos el ancla y pongo rumbo a Altea a las 14:30.
En el trayecto, hago balance y pienso en la enorme hospitalidad del RCN Gandia (con Nuria y si equipo), de nuestro “padre adoptivo” Carlos (del Barbablue), de la ceñida sin descanso con el Un Moment el sábado, de lo mal que lo pasamos en la ceñida para montar es Vedrà, de las planeadas imposibles en la popa de noche hacia la península, de la “maldita” encalmada al final…. Ah, y del bocadillo de calamares que nos tomamos tras la regata, para no perder la tradición!!
Son las 23h, Altea ya nos tenían amarre preparado, cogemos el coche, nos quedan 4 horas y media hasta Barcelona. La próxima regata es el 6-7 de Marzo, 200 Millas a Dos del CNAltea. Lo hemos dejado todo preparado. A ver qué nos depara la meteo en la próxima regata!
